martes, 29 de abril de 2008

La forma física en Ford Rallye Sport. En plena forma para luchar por el título mundial.

Mientras una multitud de mecánicos se preocupan por los Focus, el equipo médico de Ford se asegura que los pilotos y copilotos del equipo se encuentren en buenas condiciones físicas. Ésta es una pequeña historia sobre todo ello.

  • Un equipo médico mantiene a los integrantes del Ford Rallye Sport en óptimas condiciones: Médicos y fisioterapeutas están presentes en todos los rallyes.
  • Los médicos trabajan, hacen ejercicio, comen y charlan con el equipo.
  • Cada uno de los 75 integrantes del Ford Rallye Sport presenta diversos retos médicos.
  • El equipo médico es autosuficiente y lleva consigo a todas las pruebas del mundial un hospital “en miniatura”.
  • El ejercicio controlado mantiene en forma, evita lesiones y reduce el estrés.
  • Los miembros del Ford Rallye Sport cuidan su cuerpo como auténticos atletas.
  • Los médicos están ocupados al cien por cien durante los siete días que supone cada cita del mundial.

Los servicios que ofrece el equipo médico de Ford, compuesto por el doctor Simon Morris y el fisioterapeuta Paul Thawley, pueden ser necesitados por cualquier miembro del equipo en cualquier momento de una prueba del mundial, aunque la función principal de este dúo es atender a los pilotos y copilotos.

Somos como los ayudantes personales de las estrellas”, bromea Paul Thawley. “Cuidamos no sólo de su estado físico sino también psicológico. En cada etapa de cada rallye, procuramos que todo les resulte más fácil. Recogemos y llevamos su ropa y material, los llevamos a los distintos emplazamientos, hacemos ejercicio (el equipo lleva consigo una flota de bicicletas de montaña a cada prueba), comemos y charlamos con ellos, creando así un vínculo especial que nos permite ayudarles ante cualquier crisis física que puedan tener”. Aunque la función primordial del equipo médico es cuidar de la salud de los pilotos y copilotos durante la competición, el resto del personal (de 65 a 75 miembros) plantea a Morris y a Thawley todo tipo de retos médicos, como en cualquier otro lugar de trabajo.

Los problemas más habituales suelen ser dolores en la espalda, en los hombros y ataques de ciática. Los mecánicos sufren a veces quemaduras o cortes leves. Cualquier miembro del equipo puede resbalar por una escalera helada en Suecia o encontrarse indispuesto debido a una gastroenteritis en Kenya. Hasta el momento, han podido evitar las mordeduras de serpiente en Australia…
Como ocurre con otras áreas del equipo Ford Rallye Sport, el equipo médico debe ser autosuficiente. Morris y Thawley transportan a cada prueba del mundial, vía aérea, tres enormes cajas que contienen todo tipo de instrumental y material médico para un hospital “en miniatura”. Están provistos de vendajes, tablillas, material para el tratamiento de traumatismos, un kit de electroterapia, un aparato de ecografías de onda larga de diagnóstico para heridas en los tejidos blandos, así como medicamentos para tratar cualquier caso, sin olvidar un cargamento de bebidas isotónicas y una camilla plegable para practicar la fisioterapia que se incluye también en todos los camiones del equipo.
Antes del rallye, Thawley hace un chequeo a la columna vertebral de los integrantes del equipo y luego se concentra en sus espaldas y cuellos. “Debido a la fuerza de la gravedad y a los impactos que reciben, es mucha la tensión que se acumula en el cuello de los copilotos en tan sólo un tramo de rallye. Los pilotos tienen que anticiparse y reaccionar, aunque apoyados al volante amortiguan en parte las sacudidas. Para los copilotos, los impactos son más inesperados, por lo que hay que mantener sus espaldas y cuellos flexibles”.

¿Hasta qué punto es importante la forma física del equipo?

"Estoy seguro de que la buena forma física juega un papel vital en el éxito de un equipo de rallyes”, afirma Thawley. “Cuanto más en forma se esté, más sencillo resulta soportar el estrés físico. Si sus cuerpos están en forma para hacer frente de manera subconsciente al esfuerzo físico entonces, a nivel consciente, pueden concentrarse totalmente en ganar la carrera”. Afortunadamente para Morris y Thawley, los pilotos y copilotos de Ford se toman muy en serio el hecho de mantenerse en buena forma física y de llevar una dieta saludable, incluso en su vida cotidiana fuera de los rallyes: Carlos Sainz va en bicicleta y juega al fútbol; Luis Moya hace gimnasia y nada 90 minutos al día; Colin McRae recorre habitualmente unos 100 kilómetros en bicicleta y Nicky Grist hace ejercicio con su bicicleta de carreras en Gales. Todos ellos están en muy buena forma cardiovascular y, durante las competiciones, los médicos preparan actividades para mantener esa buena forma con la que evitar lesiones, aliviar el estrés y estrechar sus vínculos con el personal del equipo.

Nuestro equipo normalmente sigue una dieta mediterránea, más saludable que, por ejemplo, salchichas con puré o hamburguesas con patatas”, comenta Thawley. “Les gustan las comidas ligeras, ensaladas, pescados y pastas con bastante aceite de oliva. Dado que Colin pasa tanto tiempo en Mallorca, ha dejado de lado la cocina tradicional escocesa que puede resultar más bien pesada. Todos beben líquidos naturales y evitan las grasas saturadas. Hay que admitir que cuidan su cuerpo como atletas profesionales”.
Esta dedicación del equipo al cuidado físico nace en parte de la propia necesidad, como nos confirma Nicky Grist, copiloto de Colin McRae: “Aunque los rallyes mundialistas han cambiado muchísimo en los últimos 10 años, todavía es muy importante estar en buenas condiciones físicas. Ahora los rallyes son más compactos, pero a veces pasamos hasta 16 horas en el coche. Las velocidades son mucho más altas; con el desarrollo de las suspensiones y de los neumáticos, las fuerzas de la gravedad son mayores y, debido al gran nivel de competitividad de los coches, debes ir al límite la mayor parte del tiempo. Todo ello requiere un mayor nivel de concentración”.“Para las cuatro pruebas que exigen un largo desplazamiento, los equipos vuelan en primera clase, con lo cual su cuerpo no acusa tanto el viaje. El cansancio ocasionado por los cambios en su reloj biológico, todavía puede resultar un inconveniente. Generalmente, en el programa de estas pruebas se incluye más tiempo de descanso para el equipo. Desgraciadamente no existe ninguna solución mágica para el efecto jet lag y utilizar pastillas para dormir no es muy prudente, ya que podría conllevar un positivo en un control antidopaje”, añade Thawley.

Un turno de siete días…

Además de ser el fisioterapeuta del equipo, Thawley es auxiliar de enfermería, de modo que proporciona cobertura médica durante los tres días de reconocimientos que se celebran antes de cada rallye del mundial: “Los equipos conducen diariamente coches dotados de las medidas de seguridad (barras, arneses) para tomar notas de las especiales. Instalamos una minibase en un camión de asistencia y un pequeño motorhome con bebidas, ensaladas y frutas con alto contenido en agua. Los mecánicos examinan los coches y yo al equipo, aplicándoles fisioterapia en caso de que la requieran”.
Al término de cada jornada, el equipo regresa al hotel y, si hay tiempo, médicos y pilotos se van a dar una vuelta todos juntos en bicicleta, a menudo una recorrido de 50 kms. “Montar en bicicleta es bueno para el corazón y los pulmones y, a diferencia de correr, es un deporte de no-impacto. Después de una jornada de reconocimientos, queremos evitar cualquier sacudida añadida de rodillas, tobillos o columnas: no queremos lesiones justo antes de empezar un rallye”.
El equipo médico ha tenido que asistir a algún piloto en más de una ocasión en vísperas de un rallye. François Delecour se rompió un hueso de la mano antes del Acrópolis 2001, pero consiguió competir en la prueba. Después de que los médicos le atendieran a diario y le pusieran una muñequera, consiguió finalizar la dura prueba en quinto lugar y hacerse con dos puntos del campeonato mundial. En Argentina 2001, Carlos se hizo daño en la espalda durante un relajado partido de fútbol. En una situación normal, esa lesión requeriría reposo absoluto, pero Carlos insistió en competir. Con unas sesiones fisioterapéuticas regulares, sacó adelante una gran actuación y consiguió el tercer puesto en la prueba.
El shakedown del miércoles por la tarde es la última oportunidad que tienen los equipos de poner a prueba los Focus antes del rallye. Thawley llega al lugar antes que el equipo: “Recojo todos los cascos del equipo, los monos ignífugos, la ropa interior, guantes, calcetines y botas, lo llevo todo al emplazamiento del shakedown y lo dejo en el motorhome listo para que puedan cambiarse. Al término de la sesión, llevo al equipo al hotel y les doy unos cuantos masajes para aliviar cualquier posible dolor”.
El jueves, el equipo médico asiste a una reunión especial de médicos con los organizadores del rallye en la cual se confirma la ubicación de los vehículos de emergencia en los lugares clave de los tramos especiales. Morris y Thawley comprueban juntos que tienen todo el material y las provisiones necesarias preparadas para los tres días de rallye, que generalmente empieza el viernes por la mañana.
Los tres días de competición, de viernes a domingo, siguen un esquema similar. Thawley se levanta pronto y se va a la asistencia a preparar bebidas isotónicas y ropa limpia para los equipos. Entre tramo y tramo, los equipos regresan a la asistencia tres o cuatro veces al día con pausas de 20 minutos. Si es necesario, se ocupa de muñecas y espaldas doloridas en la tranquila oficina de la parte superior del motorhome. Por la noche, cada miembro del equipo se somete a un examen exhaustivo y a una sesión de tratamiento.


¿Qué tiene de bueno este trabajo?

“¡En realidad no es un trabajo! Según mi opinión, un trabajo es un asunto “de 9 a 5″ con una serie limitada de responsabilidades y sin ninguna implicación antes o después de ese horario. Lo que me gusta al hacer de fisioterapeuta de un equipo de rallyes es la diversidad de las tareas que desempeño. Trabajo en horarios muy variables, y como y hago ejercicio con las personas a las que atiendo. Se respira un ambiente muy distinto al de un puesto de trabajo fijo. Se parece al ambiente del ejército, con el equipo lejos de casa, trabajando juntos para un objetivo común. Todos y cada uno de los miembros del equipo desea ganar”.

El ejemplo de Luis Moya


Como Carlos Sainz, Luis Moya es un claro ejemplo de lo que es mantenerse en forma. Quizás sin unas buenas condiciones físicas su accidente con Carlos en unos ensayos privados previos al pasado Rallye Catalunya hubieran tenido mayor gravedad, pero Luis es un hombre habitual al gimnasio y como muestra un botón: “Paso muchas horas en el gimnasio, me gusta y me permite disfrutar de una buena condición física. Todo ello me ayudó mucho en las secuelas del accidente que tuvimos con antelación al pasado Catalunya; ahora estoy francamente bien y lo más importante es que sigo al más alto nivel y me agrada prepararme. Todo esto se nota luego, y mucho, en las carreras”.

El equipo médico del Ford Rallye Sport

Paul Thawley se incorporó al ejército a los 16 años y se formó como preparador físico. Con 25 años, siendo sargento, estudió la licenciatura de Fisioterapia, antes de trabajar 18 meses en los Servicios Nacionales de Salud. Su pasión por el deporte le llevó al fútbol, primero como fisioterapeuta del equipo de fútbol londinense ‘Queen’s Park Rangers’ y, más tarde, a ocupar un cargo en la ‘Football Association Premiership’ como responsable de formación y control de dopaje. Tiene un master en Rehabilitación Avanzada y Medicina Deportiva y trabaja para el equipo Ford Rallye Sport a tiempo completo como fisioterapeuta y auxiliar de enfermería.
El Doctor Simon Morris es un recién llegado al mundo de los rallyes. Natural de Lancashire, tiene 31 años. Se formó en el Instituto Médico de Liverpool y se licenció en Medicina General en 1997. Simon trabajó tres años como médico para compañías de cruceros antes de incorporarse en 2001 al equipo Ford Rallye Sport. Actualmente es responsable de la salud de todos los integrantes del equipo, tanto durante las sesiones de ensayos como durante los rallyes del mundial.

El renacimiento llega con los Súper 2.000

El Mundial de rallys pasa por un momento bajo. La pasada temporada tan sólo había tres marcas, Citroën, Ford y Subaru, implicadas y la llegada de una nueva este año, Suzuki, no ha servido para mejorar mucho. Pero por fin se atisba un renacimiento con las normativas de reducción de pruebas por año y la nueva categoría estrella, los Súper 2.000, que entrará en vigor en 2011.
La historia de la especialidad ha estado marcada por los cambios de reglamentación técnica que buscaban la llegada de nuevos fabricantes. Tras las primeras épocas con vehículos muy minoritarios, como el Lancia Stratos o el Alpine Renault, se crearon los Grupo B, auténticos Fórmula 1 de los tramos, cuya ventaja era que resultaba muy fácil a una marca sacarlos a la serie porque sólo se exigían 200 unidades fabricadas para su homologación.
Pero su peligrosidad, con varios accidentes mortales en 1986, obligó a buscar vehículos mucho menos peligrosos y espectaculares, los Grupo A. Pero en este caso había pocas marcas capaces de fabricar en serie 5.000 unidades de un modelo difícil de vender, por lo que se buscó la salida con los 'World rally car'. La verdad es que con ellos se alcanzó uno de los mejores momentos, con siete marcas implicadas oficialmente. El problema fue que la llegada de la electrónica llevó a un coche que valía sin ella 300.000 euros a valer el triple, y además se elevó el calendario a dieciséis pruebas, por lo que de nuevo hubo desbandada entre las marcas por el aumento de costes.
Ahora se va hacia los Súper 2.000, una categoría que ya triunfa en el Intercontinental Rally Challenge (IRC) y los campeonatos nacionales por sus reducidos costes, al que se va a aumentar su competitividad con la inclusión de un turbo y un alerón. Además, esto permitirá que los vehículos del Mundial puedan adaptarse a cualquier otro certamen sólo con quitarles esos dos elementos, algo que no ocurre en la actualidad con los WRC.
Por el momento Peugeot, Fiat, MG y Volkswagen ya tienen un coche de esta categoría, y además este año debutarán el Skoda y el Suzuki. Pero también las marcas protagonistas del Mundial actual, Citroën, Ford y Subaru, están proyectando ya sus modelos Súper 2.000. Otros constructores como Mitsubishi, Hyundai u Honda la miran con buenos ojos, por lo que muy posiblemente podría alcanzar la decena de equipos oficiales.

Videos espectaculares

Christian Rigollet - Ford Sierra RS Cosworth - Rallye Lurnne 2003

Luis Flores - Peugeot 206 WRC - Subida al Fito 2005

Jean Ragnotti - Renault 21 Turbo - Exhibición

Accidente MG Metro 6R4

También con más de cuarenta







http://www.todorallyes.es/magazin/magazin/Tambien-con-mas-de-08-2006-13398.html

Hay pilotos y copilotos que están en activo y compitiendo con una edad superior a los cuarenta. ¿Qué supone desde la salud? ¿Somos igual de competitivos?
En la revisión de los pilotos y copilotos que han hecho historia en el mundo de los rallyes, llama la atención que algunos de ellos han competido en plena actividad elitista hasta edades donde en otros deportes sería imposible. En el caso de los pilotos, no nos hace falta fijarnos en los top, como Ari Vatanen, Stig Blomqvist, Jean Ragnotti, etc..., pues de seguro que en tu campeonato regional existe algún piloto con más de cuarenta años compitiendo y, por qué no, ganando rallyes o incluso certámenes. Los copilotos, por su parte, son más cotizados y buscados para ocupar los bacquets del terror si tienen edades próximas a los cuarenta o superiores, pues acreditan una experiencia en rallyes que va a facilitar o enriquecer al piloto, normalmente joven promesa; son nombres como Fabrizia Pons, Voitto Silander, Seppo Harjanne, etc...

Buena preparación física, base de trabajo

En los dos casos, la experiencia es un valor que permite, a unos y otros, disfrutar de los rallyes y de otras modalidades del automovilismo a edades superiores a los cuarenta años. La evidencia histórica de los pilotos y copilotos finlandeses eternos, se basa en una tremenda profesionalidad, sumada a la conciencia profunda de la preparación física como base para la prevención de lesiones que se pueden vivir en una trayectoria deportiva larga. Basándonos en datos científicos, una de las pérdidas que se suelen dar en la mayoría de humanos que sobrepasan los 35 años de edad, es la reducción de la velocidad de reacción delante de un estímulo que requiera una respuesta. Simplificando, lo conocemos popularmente, como una pérdida de reflejos. Muchas veces se han dado casos donde esta situación era originada por un problema visual, que con la pertinente intervención del equipo óptico, se ha solucionado sin más.





El rendimiento visual

Una de las situaciones o momentos en un rallye donde se pone al límite el sistema visual, que es el que nos va a permitir afinar al máximo el tiempo de nuestra respuesta al volante o notas, son los tramos de noche. En ellos, muy a pesar de la alta tecnología de iluminación de nuestro vehículo, se exige el máximo a todos los niveles, tanto de reflejos como de acciones precisas, para tener un buen rendimiento deportivo. Una solución es el trabajo propuesto en otros artículos de esta sección, con máquinas de activación de reflejos. Las revisiones visuales deberán realizarse con más periodicidad que en otras etapas deportivas. Si nos hemos mantenido en forma siguiendo una buena planificación y preparación física, la fatiga muscular derivada del paso de las horas en el habitáculo no debería ser un problema; más aún si revisamos las horas y cantidad de tramos que se hacían en los rallyes de antes en comparación con los de hoy, con largas horas en los ser vice donde hay tiempo para recuperarse. Sin embargo, sí se suele dar con más frecuencia en pilotos y copilotos de mas de cuarenta años sufrir lesiones musculares, como las típicas de espalda. Está claro que se pude disfrutar de los rallyes pasados los cuarenta, sólo debemos fijar nuestras prioridades y objetivos, pues de seguro no serán los mismos que los de un joven equipo que compite en un campeonato de promoción. De todas formas, los hay que hacen correr mucho a los jóvenes, y si no, no tenéis más que revisar un listado de tiempos del Mundial de Producción de Stig Blomqvist. Si estáis en esa franja de edades donde la revisión médica previa a la obtención de la licencia federativa dura un poco más que antes, ya lo veis, es más que compatible pilotar y copilotar con más de cuarenta primaveras encima.

Espalda de roble

La natación siempre ha formado parte de la preparación física para mejorar el estado de nuestra espalda. Precisamente ésta es la zona más propensa a las lesiones en los rallyes, y su práctica puede ser muy beneficiosa para nosotros.
La natación es un deporte muy completo para la preparación de las espaldas de pilotos y copilotos. Basándose en el principio físico de la flotación, nos permite preparar a la espalda en un medio donde la gravedad actúa de distinta forma que en el medio aéreo. Si lo llevamos a los rallyes, podemos evidenciar que las largas horas sentados en un bacquet no son el mejor de los mecanismos para cuidar nuestra espalda, a lo que encima sumamos las vibraciones del vehículo, inercias y, en el peor de los casos, los rasantes o impactos que se derivan de la superficie de los tramos.
Previenen lesiones
No hay estudios científicos que relacionen los beneficios de la natación para los pilotos de rallyes, pero sí he podido evidenciar que la mayoría de los pilotos de élite la incluyen en sus programas de preparación física, pues tiene dos beneficios a corto plazo. El primero de ellos es el de mantener una espalda fuerte, sana y resistente a la fatiga muscular; de ello se deriva un perfecto elemento de prevención de lesiones y ayudar a recuperarse rápido de ellas si éstas aparecen después de un rallye. El segundo es un aspecto más psicológico, pero no menos importante: los pilotos y copilotos que practican la natación suelen confirmar que el medio acuático es muy relajante para el estrés diario y el propio derivado de un rallye. La natación nos permite, de forma individual, desconectar mientras realizamos los movimientos en el agua.
Combinar estilos y personalizar
Para la correcta realización de los cuatro estilos de natación (crol, braza, espalda y mariposa), el papel del preparador físico especializado en natación es clave. Debemos tener en cuenta que una cosa es nadar y otra cosa distinta es nadar correctamente. El realizar un estilo de forma incorrecta puede cargar y fatigar estructuras musculares. Por ello, debemos adaptar nuestras sesiones a nuestro nivel técnico. Biomecánicamente se ha descrito el estilo de espalda como el más completo para hacer un buen trabajo global muscular de la espalda. Al flotar cara arriba y ejercer elongaciones con los brazos nos permite ayudar a autotraccionarnos y fortalecer piernas y brazos, por el efecto de la resistencia del agua. Los otros estilos deberán ser revisados, pues el crol requiere de un aumento de la movilidad cervical y la mari posa del segmento lumbar, siendo esta última la de más difícil ejecución.
Uso de elementos de flotación
Si queremos aprender y hacer trabajar más una zona de nuestro cuerpo u otra debemos utilizar elementos de flotación, como tablas de foam, los populares churros, balones, etc… Con ellos, podremos acentuar el trabajo de un segmento u otro. Por ejemplo, si ponemos un flotador en medio de las piernas y cerramos éstas podremos fomentar un mayor trabajo muscular de los brazos y la zona alta de la espalda. Por el contrario, si posicionamos el flotador en la parte posterior de las cervicales, sujetado con las manos, el trabajo que haremos será mayor en las piernas y la zona lumbar. Así, podremos potenciar y ganar en fuerza y resistencia en las zonas más propensas a sufrir lesiones en los rallyes: cervicales y lumbares. En nuestros días, las piscinas abundan en un montón de lugares: piscinas municipales, centros e instalaciones deportivas y los mismos hoteles donde pasamos los días de reconocimientos y propios de los rallyes. Por eso, estamos ante una actividad física muy completa y fácil de realizar, donde el bañador y la toalla son las herramientas básicas para su práctica.

Salvi Delmuns (Prof. de Fisioterapia Universidad Ramon Llull)

Ejemplo de Entrenamiento para Automovilismo

http://www.trainercontrol.com.ar/preparacion/automovilismo/index.htm

Paso 1 - Formulario de consulta

Completar el formulario de consulta para obtener información detallada, acerca de la metodología de trabajo y los costos. También podrás solicitar una entrevista personal sin cargo.
Paso 2 - Entrevista previa

Se coordinará una entrevista personal sin cargo con el preparador físico donde se explicará en forma detallada los aspecto del programa de entrenamiento.
Paso 3 - Control físico

Se realizará el control físico específico al deporte que determinará el estado de forma actual, permitirá establecer un punto de inicio para confeccionar el plan, y ver el logro de los objetivos propuestos.

Paso 4 - Preparación física

Se podrá optar con la asistencia del preparador físico en cada sesión de entrenamiento o bien se entrega el plan de entrenamiento y se establece un contacto permanente con el profesor vía e-mail y se programan encuentros personales periódicos.

lunes, 28 de abril de 2008

El entrenamiento psicofísico aplicado al automovilísmo

En el deporte de competición rara vez se produce un milagro; los éxitos deportivos y los grandes campeones son el resultado del trabajo sistemático y organizado durante largos periodos de tiempo, llevados a cabo por equipos de trabajo perfectamente coordinados y cohesionados. La investigación científica actual y las ciencias auxiliares del deporte han favorecido en gran medida las mejoras alcanzadas y los récords pulverizados en los últimos tiempos. La medicina del deporte, la biomecánica deportiva, la psicología del deporte, y las nuevas tecnologías aplicadas entre otras, nos permiten obtener datos a través de los cuales se posibilita la mejora en los criterios utilizados al aplicar el entrenamiento a la competición.
Para facilitar la comprensión de una necesidad de entrenamiento total e individual acorde a las características de cada sujeto, analizaremos el fenómeno del Movimiento Deportivo con todas sus características diferenciales y los factores que intervienen para su puesta en ejecución. El origen de todo Movimiento Deportivo o gesto técnico específico posee una serie de características y condiciones que lo hacen diferente a otro tipo de acciones motrices.
En el mismo intervienen procesos de percepción sensorial, procesos de estimulación psíquica, procesos de dirección y regulación nervioso central-energética y funcional anatómica (coordinación), procesos de asimilación cognitiva y fuerzas intervinientes. Todos los procesos y elementos anteriormente mencionados producen el Movimiento Deportivo, caracterizado por una estructura del movimiento, fases, partes, y por las características del mismo.
El movimiento deportivo considerado como un acto, resulta ser complejas estructuras de carácter psicofísico que son la consecuencia de un proceso constante de efecto reciproco entre el sujeto y el medio que lo rodea. Los objetivos preestablecidos del acto, adquieren una importancia central para el dirección y el control de las funciones y las acciones musculares. A la hora de analizar los Movimientos Deportivos se ha de considerar al deportista en cualquier situación como una entidad que percibe, siente y se mueve, existiendo una estrecha relación entre la ejecución externa y los procesos de regulación interna.